Un largo periodo de sequía dejo al oeste de Estados Unidos en situaciones vulnerables a incendios forestales, una situación que se agravada por las altas temperaturas
Bomberos de Los Ángeles debieron soportar altas temperaturas el pasado jueves mientras intentaban luchar contra un incendio en una autopista de California, que fue causado por la ola de calor que azotó al oeste del país.
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El fuego se apoderó de dos mil hectáreas cerca de los Ángeles y el combate en contra de las llamas fue atendido por aviones rociadores, Super Scooper.
Siete de los bomberos tuvieron que ser trasladados al centro de salud luego de sufrir lesiones. Ya todos fueron dados de alta.
El incendio se produjo en las temperaturas cercanas de 43ºC, se espera que el "domo de calor" dure una semana más y los termómetros superarán los 46 ºC en algunas áreas con mucha población.
Robert García, jefe de Bomberos Forestales Nacionales dijo que el crecimiento del fuego fue "una llamada de atención", con "un crecimiento muy rápido y un comportamiento muy explosivo".
Incluso las temperaturas nocturnas no ofrecerán ningún tipo de alivio, pues no seran menores de 26ºC en la mayoría de lugares.
Es bastante común que en el sur de California se experimenten olas de calor en septiembre, pero las temperaturas arriba de los 37ºC se consideran altas incluso en este estado.