La ciudad de Tucson, en Arizona, anunció el cierre temporal indefinido de una planta de tratamiento de agua debido a un alto índice de contaminación de pozos.
La alerta en Tucson sucedió por los altos índice de contaminación de pozos por productos químicos que pudieran provocar cáncer.
La planta del Proyecto de Remediación (TARP) cerrará de forma indefinida el próximo 21 de junio.
En los pozos de la planta fueron encontrados químicos cancerígenos.
Químicos cancerígenos
El lugar tenía altos y crecientes niveles de perfluoroalquino y polifluoroalquilo (PFAS) hallados en pozos de agua subterránea.
La medida es una forma preventiva para evitar que estos productos puedan contaminar los pozos de agua potable.
La planta sirve a aproximadamente 60.000 residentes de barrios primordialmente de bajos recursos e hispanos.
Los productos son considerados como “químicos eternos” debido a que no se descomponen fácilmente en el agua.
Además, diversos estudios los han señalado como causantes de cáncer.
El cierre de la planta no afecta el servicio de agua a los residentes de la ciudad. EFE