Arsen Hernández pidió a las autoridades que no desistan en la búsqueda de sus dos hijos cubanos de 4 y 6 años que salieron rumbo a Florida, Estados Unidos. Los pequeños viajaban junto a un grupo de balseros a bordo de una embarcación que desapareció en Bahamas.
Una veintena de personas salió de Cuba el 1 de marzo, entre ellos los niños y su madre, Lisbethy Alfonso Aborresco, de 28 años. El grupo fue abandonado por el piloto en un cayo en el Atlántico mientras arreglaba la embarcación, según indicó Hernández a la cadena hispana Univisión.
El presunto conductor de la embarcación, Kiko García, fue detenido en el archipiélago de Bahamas bajo sospecha de tráfico humano y deportado a Miami.
Después, dos personas, entre ellas el padre de los niños, fueron en una lancha a buscar al grupo de cubanos, pero se encontraron con que esa embarcación explotó con ellos a bordo.
Las autoridades bahameñas confirmaron el hallazgo de la lancha quemada cerca de Cay Sal –Cayo de Sal- a medio camino entre Cuba y los Cayos de Florida. Por esa razón, salieron en búsqueda de los balseros, pero solo encontraron a un grupo, entre los cuales ya había muerto uno. A la madre y a los niños no los encontraron.
«Nunca pensé pasar por algo así. No puedo hacer nada más que rezar y tener fe. Trato de estar lo más tranquilo que puedo y no perder la esperanza de que los pueda volver a abrazar».
dijo Arsen Hernández a la cadena hispana Univisión.
Mantienen la búsqueda
Las autoridades de Bahamas y los guardacostas de Estados Unidos mantienen la búsqueda de la madre, los dos hijos y otros dos cubanos, que se mantienen desaparecidos.
Hernández y su familia buscan contactar a los balseros rescatados para preguntarles qué pasó exactamente. También, para saber cuando fue la última vez que vieron a Lisbethy y a sus hijos.
Según las autoridades estadounidenses, los intentos de inmigrantes cubanos de alcanzar las costas de ese país se han intensificado en los últimos meses.
En lo que va del año fiscal, es decir desde el 1 de octubre de 2020, las tripulaciones de la Guardia Costera han interceptado a por lo menos 87 cubanos que pretendían alcanzar las costas de Florida. Mientras que durante 2019, fueron interceptados en total 314 cubanos.
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