Murió el primer migrante en un centro de detención de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés), por el nuevo coronavirus Covid-19.
El primer caso del coronavirus en un centro de detención fue confirmado el pasado 24 de marzo, y hasta ahora se reporta el primer fallecido.
Informes de medios locales indican que se trata de Carlos Ernesto Escobar Mejía, de 57 años de edad, quien es originario de El Salvador.
El centroamericano estaba en el Centro de Detención de Otay Mesa, en San Diego, California, luego de cruzar la frontera de forma irregular.
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En ese centro de detención se registran 132 de los 705 casos de Covid-19 en las 41 cárceles bajo el control de ICE, de las 220 en todo el país.
El salvadoreño estaba internado en un hospital desde finales de abril, cuando su estado de salud empeoró.
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Culpan al Gobierno por la muerte
La Unión Americana para las Libertades Civiles (ACLU), emitió un comunicado en el que culpó de la muerte al Gobierno de Donald Trump, por negar la liberación de los detenidos.
“Los inmigrantes detenidos allí se han referido a ella como una ‘trampa mortal’ debido a la falta de medidas de precaución por parte del personal”, señaló la ACLU.
Una semana antes la ACLU publicó un reporte sobre el alarmante crecimiento del coronavirus en la cárcel de Otay Mesa luego de que presentara una demanda para exigir la liberación inmediata de las personas médicamente vulnerables detenidas.
“Hoy una de esas personas ha muerto porque ICE se negó a liberarlo cuando todavía tenía la oportunidad de sobrevivir a este mortal virus”, recalcó.
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