La familia y el abogado del pastor guatemalteco Hugo Gómez, detenido por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) desde agosto de 2019 a raíz de una orden de Interpol, acusaron a la agencia de no respetar el debido proceso del migrante.
“Están dando una sentencia a mi cliente sin darle el derecho de defenderse en libertad y aclarar una acusación injusta”, dijo el abogado Alan Diamante, que representa a Gómez.
El caso del líder religioso cobró notoriedad en medio de la pandemia de coronavirus, ya que el guatemalteco de 61 años se contagió de COVID-19, mientras se encuentra en el Centro de Detención de Inmigrantes en Adelanto, California. La familia asegura que al religioso le quedaron problemas de salud.
“Parece que sus pulmones quedaron dañados, y él sigue estando en riesgo. Le están aplicando una tortura”, advirtió con voz quebrada Leonor Gómez, esposa del detenido.
Detalles del caso
El éxodo migratorio de Gómez comenzó en agosto de 2019 cuando agentes del ICE llegaron a su casa a arrestarlo debido a una orden de Interpol emitida en 2009, en la que lo acusan de secuestro y desaparición forzada cuando él trabajaba como policía en Guatemala en la década de 1980.
Diamante cuestiona que el ICE hubiera puesto a su cliente en la mira después de diez años de que se hubiera emitido la orden por un delito supuestamente cometido en 1984.
“¿Por qué esperaron tanto tiempo para arrestarlo? Además, las pruebas que ha presentado el Gobierno guatemalteco no presentan una evidencia en contra de mi cliente”, ahonda el jurista.
Gómez, que emigró de Guatemala en 1987 junto a su esposa y su hija, logró hacerse residente permanente en 2003.
Según su esposa, el inmigrante intentó hacerse ciudadano estadounidense pero en ese momento enviaron su petición a segunda revisión, y no volvieron a saber sobre las autoridades migratorias.
“Nosotros pensamos que todo se iba a solucionar porque inicialmente pensamos que a quien buscaban era un homónimo de mi esposo. Es que ni la fecha de nacimiento coincide pero en Guatemala insisten que es mi esposo”.
Leonor Gómez, esposa del pastor.
La familia buscó el apoyo de la Fundación Contra el Terrorismo en Guatemala para ayudar a limpiar el nombre del pastor.
“Esta es una acusación de clase política, impulsada por la izquierda, estamos seguros que Gómez es inocente y no tuvo nada que ver en ese secuestro”, indicó Raúl Falla, miembro de la fundación que está asistiendo en el caso.
El ICE detuvo a Gómez por supuestamente mentir en su solicitud de residencia permanente con relación a si había cometido crímenes graves en el pasado.
La familia y el abogado Diamante están pidiendo a las autoridades migratorias que permitan a Gómez enfrentar las acusaciones de las autoridades de Guatemala desde Estados Unidos en libertad condicional.
“Estamos viviendo aquí desde hace 34 años, no ha tenido ningún delito. Eso debe hablar sobre su conducta, pero aquí lo están encontrando culpable antes de que en Guatemala lo juzguen”, insistió Leonor Gómez.